8 de marzo: declaración y experiencias

Feminist Workshop (Taller Feminista) es una ONG fundada en 2014 cuya misión es la creación de un espacio para el desarrollo de la comunidad feminista en Lviv y Ucrania. Desde el comienzo de la invasión total de Ucrania, el "Taller feminista" ha ampliado el alcance de sus actividades. La guerra a gran escala no sólo agravó los problemas que ya existían en la sociedad, sino que también añadió nuevos retos y obligó a las activistas a crear nuevas áreas de trabajo. Puedes encontrar más información sobre su trabajo durante la invasión aquí

8 de marzo: declaración del Taller Feminista

El 8 de marzo, nosotras, feministas ucranianas, queremos recordar a nuestras hermanas en el mundo que la guerra genocida en Ucrania todavía continúa. Las ciudades ucranianas sufren bombardeos diarios, y los civiles son asesinados en sus camas. En uno de los ataques con drones más recientes, ocurrido en marzo en Odesa, 12 personas fueron asesinadas en sus casas, incluyendo a 5 niños cuyos cuerpos fueron hallados entre los escombros, abrazados a sus madres. El ejército ruso continúa torturando y violando a mujeres ucranianas en los territorios ocupados, secuestrando niños ucranianos y cometiendo un ecocidio. Millones de mujeres ucranianas se convirtieron en desplazadas internas, perdiendo sus hogares, trabajo y la posibilidad de tener una vida normal, muchas enfrentan una crisis humanitaria en las zonas de primera línea, y miles de mujeres ucranianas siguen siendo voluntarias y sirviendo en las fuerzas armadas que resisten a la invasión.

Las mujeres ucranianas se enfrentan a una invasión fascista e imperialista por parte de Rusia, mientras que nuestro derecho a resistir este brutal ataque armado sigue siendo cuestionado por el movimiento progresista occidental. Nos enfrentamos al rechazo de nuestro derecho como pueblo oprimido a hablar por nosotras mismas, a hablar de nuestras experiencias, y a la negación de nuestro derecho a la autodefensa y a la autodeterminación. Queremos recordar que los ucranianos no somos un objeto para las discusiones, somos personas que tenemos nuestras voces, que enfrentamos la opresión imperial y sabemos cómo luchar contra ella. Es crucial subrayar que la resistencia contra el ataque armado de un país imperialista pasa inevitablemente por la resistencia armada.

Nuestra lucha no es sólo una lucha por la paz, sino también una lucha contra la Rusia imperialista xenófoba y patriarcal. Ahora necesitamos urgentemente la ayuda y la solidaridad de la comunidad internacional. Compartid las voces ucranianas, abogad por la ayuda militar a Ucrania y por nuestro derecho a la autodefensa.

La vida en tiempos de guerra: percepciones, logros y preocupaciones

En el segundo aniversario de la invasión a gran escala de Rusia en Ucrania, queremos coontarnos mutuamente y al mundo entero nuestras vidas durante la guerra. Las integrantes de nuestro equipo han compartido sus preocupaciones y percepciones, logros y ansiedades.

"La guerra me ha demostrado que todo es posible. Literalmente todo. Lo mejor y lo peor. La guerra me ha mostrado que todas las personas en el mundo están realmente cerca unas de otras. Desde David Beckham entregando su cuenta de Instagram a un médico de Járkiv, hasta Angelina Jolie comiendo croissants a una manzana de nuestro refugio... Es surrealista, pero es nuestra realidad. La guerra me ha mostrado cuán frágiles son las personas a las que consideraba titanes inquebrantables. Vi a algunas personas investidas con gran responsabilidad, y también tienen miedo. También anhelan que alguien les diga que están haciendo las cosas bien". Katya, Coordinadora del Departamento de Crisis.

"¿Cómo es la vida durante la guerra? Depende de quién esté preguntando. Por un lado, la vida continúa: sigues con tu rutina, estudias, trabajas, cocinas y cuidas de tu salud y tus seres queridos. Por otro lado, cambias permanentemente. Cada nuevo día, cada informe de noticias, cada explosión te carcome. Luego, tus heridas sanan, te vuelves más fuerte y el ciclo comienza de nuevo. Vivir durante la guerra significa recibir un mensaje de un amigo que dice "Murió hace 3 días, pero me lo acaban de decir", e ir a la videollamada de trabajo en Zoom conteniendo las lágrimas. Significa que tu hijo te envía videos sobre primeros auxilios en lugar de dibujos animados. Significa donar a las Fuerzas Armadas de Ucrania, trabajar, participar en voluntariados y lidiar con la culpa omnipresente y la sensación global de "no es suficiente". Es decirte a ti mismo "Una explosión más, y definitivamente iré al pasillo". Una explosión después, vas al pasillo con tu almohada, enterándote por las noticias de que a unas manzanas de ti están tratando de rescatar de debajo de los escombros a una familia que no conoces. Significa despertar exhausta y destrozada. Significa decirte a ti misma "No eres la única que se siente así, recomponte. Todos se las arreglan para vivir de alguna manera, así que hazlo también y deja de quejarte". Significa minimizar tus problemas y poner los ojos en blanco cuando lees sobre otro taller de cuidado personal. Significa no preocuparte por envejecer, ya que no estás seguro de vivir tanto tiempo. Significa bromear sobre la muerte y sonreír mucho porque eso te mantiene cuerda. Significa compartir furia, dolor y culpa con todos los que conoces. Y lo más aterrador es que vivir durante la guerra significa acostumbrarse. Y simplemente sigues imitando la vida ordinaria." Olya, Directora de la ONG "Taller Feminista".

"La guerra me hizo darme cuenta de que los objetos materiales en realidad no tienen un valor real. Lo que realmente tiene valor son las personas y su bienestar. Sueño con vivir un día sin guerra, en el que no tenga que preocuparme por mis amigos cercanos luchando en el frente de batalla o por mi hijo en peligro debido a los bombardeos. Quiero ser despreocupada como antes de la guerra, pero dudo que sea posible. Estos dos años me han envejecido al menos diez años, y eso no me hace feliz. Estoy agradecida con las Fuerzas Armadas de Ucrania por la oportunidad de vivir y trabajar en Ucrania. También estoy agradecida a todas las personas que se preocupan", Maria, Directora.

"Después de que Rusia lanzara la invasión a gran escala, todos los ucranianos, incluyéndome a mí, nos preocupamos constantemente por nuestras vidas, nuestros seres queridos y el futuro de nuestro país. Debido a las sirenas, bombardeos y al estrés crónico, todos estamos privados de sueño. La guerra me hizo darme cuenta de que ¡las personas son lo más valioso! Podemos recuperar todo lo que la guerra nos quita: casas, dinero, ropa. Cualquier cosa excepto a las personas. A pesar de todas las atrocidades que trae la guerra, también hay algunos beneficios. Durante la guerra, me di cuenta de lo importante que es apoyarnos mutuamente, ser empáticos, valientes y amables, ¡y siempre recordar el poder de la solidaridad!" Tamara, Coordinadora de Necesidades de Adolescentes.

"Vivir durante tiempos de guerra para mí significa estar abrumada diariamente por una oleada de emociones y sentimientos: fatiga, endafo, orgullo, vergüenza, miedo, desesperación. Se trata de posponer la vida 'hasta que mejore'. A menudo me avergüenzo de tener un techo sobre mi cabeza y algo de comida, cuando los soldados protegen nuestra libertad en las trincheras, ignorando el frío y el peligro. Me doy cuenta de que no es saludable, pero no puedo evitarlo. La vida durante la guerra para mí significa envidiar a todo el mundo que vive sus vidas. Envidiar, ya que ahora todos mis planes son el dinero que dono, creyendo que podré vivir otro día más. Y luego otro. Se trata de esperar que nunca más tenga que enterarme de las muertes de mis seres queridos y amigos a través de las noticias. Y luego, donar dinero una y otra vez. También no puedo hacer nada con mi envidia, pero realmente quiero vivir de nuevo, y no solo existir. Quiero controlar al menos algo en mi vida. Vivir durante la guerra significa reevaluar toda mi vida y todos los problemas. Es decir más frecuentemente a mis seres queridos que los amo, ya que mañana podría no llegar. Se trata de cansarse y agotarse, pero mantenerse firme y seguir viviendo". Anya, coordinadora de medios.

"Siempre pensé que la guerra destruye tu presente y tu futuro. Al menos, pensaba, siempre puedes refugiarte en el pasado, en tu eterno refugio libre de miedo y dolor constante. Me sorprendió descubrir que la guerra también destruye el pasado. No solo las memorias comienzan a causar dolor en lugar de permitirte escapar en tus fantasías de una vida mejor que ya se fue. La guerra también intenta apoderarse físicamente de cada episodio de tu pasado. Un misil cayó en mi patio de recreo dejando un enorme cráter. Los recuerdos de mi primer amor de la infancia y el regalo romántico (una piedra con flores pintadas con gouache) se convirtieron en recuerdos de pérdida. El lugar de vacaciones en el campo es ahora un símbolo de los crímenes rusos. Esta lista podría seguir y seguir, y sé que cada persona tiene la suya. Después de perder mi sentido del tiempo como punto de referencia, estoy buscando una nueva constante que me impida perderme. La primera es ayudar al ejército, ya que solo ellos son capaces de poner fin literalmente a la guerra. La segunda son todos los momentos que me hacen feliz. Cuando hago reír a mis amigos, cuando veo escenas absurdas en la ciudad y gatos geniales al sol, cuando los castaños están en flor en Kíiv. Y como el futuro ya no existe como antes, adopté un perro sin miedos ni "peros". Así es como vivo, amando a mi gente y odiando al enemigo." Alla, Coordinadora Internacional.

"¿Cómo es mi vida durante la guerra? En realidad, no veo sentido en contárselo a otros ucranianos. A los occidentales, sí, necesitan escucharlo. Pero, ¿qué les puedo contar a las personas que comparten mis experiencias? ¿Qué puedo decirles cuando mi casa no está destruida, cuando mis seres queridos están vivos y no estoy en el frente de batalla? Por supuesto, no significa que mis sentimientos no sean válidos, pero no quiero hablar de lo mal que la paso. Ni siquiera puedo imaginar lo mal que la pasan otros. ¿Qué percepciones y cambios puedo describir? No es un evento separado sobre el que pueda reflexionar. Es nuestra vida ahora, y nuestro futuro, y nuestra realidad incluso después de la victoria. Empeorará. Solo puedo aceptarlo e intentar seguir viviendo mi vida, haciendo algo, esforzándome y ayudando a los demás." Yaryna, Coordinadora Comunitaria.

Traducido por Juan González

Artículo original

Publicado orginalmente el 7 de marzo de 2024