Bilkis, un feminismo de campo
Entrevista realizada por Patrick Le Tréhondat
Bilkis se fundó hace 4 años en Járkiv y luego, con la guerra, se trasladó a Lviv. Desde el 24 de febrero de 2022, “Bilkis ha modificado su registro de actividades para satisfacer las necesidades de la población ucraniana. Lo principal para las y los ucranianos que lo perdieron todo fue proporcionarles refugio, comida y medicamentos”, explican las feministas. Durante los primeros cuatro meses de la guerra, “enviamos paquetes al este y al centro de Ucrania. La mayoría de las veces fue hacia Dnipró y Kropyvnytsky, porque fue allí adonde muchas personas de las regiones de Donetsk y Luhansk fueron evacuadas”, precisan sus miembros. Hoy, en Lviv, han abierto un “Espacio de las cosas”, “un espacio donde se pueden dejar los objetos y ciertamente se pueden llevar”. Pero Bilkis no olvida su identidad feminista. Entre las muchas campañas que organizan, hubo una en diciembre de 2022, contra una marca de alcohol, que mostraba a una mujer desnuda en sus botellas. Las activistas se colocaron frente a la tienda de la marca en Lviv, durante 3 sábados por la tarde, blandiendo carteles que denunciaban “Dejad de sexualizar a las mujeres”, “El cuerpo femenino no es un anuncio”. El grupo fascista ucraniano Katarsis, que llegó al lugar, las amenazó físicamente. Durante varios meses, las feministas de Lviv también han organizado una distribución de comidas calientes, en “Hodivnichka”, una cantina popular todos los domingos por la mañana. Hoy responden a nuestras preguntas para hacer un primer balance de dos años de actividad de campo.
En mayo y junio de 2022 vi que organizabais las excursiones en bici de vuestro grupo alrededor de Lviv. ¿Por qué era importante para vosotras hacer estas salidas en bici? ¿Seguís haciéndolas?
En nuestro equipo está Ivanka, que es una ciclista experimentada y que anda en bicicleta todo el tiempo, en todas las estaciones. Ivanka ha organizado recorridos de corta distancia para las mujeres del equipo Bilkis. Nuestro club de ciclismo femenino estaba abierto a todas las chicas, independientemente de su nivel de experiencia. Este apoyo de la comunidad ciclista fue una buena oportunidad para empezar a explorar el mundo del ciclismo. Nuestras salidas tenían como objetivo ganar confianza en la carretera, superar miedos como el miedo a la calzada, emprender una aventura y tener una sensación de sororidad. Las salidas fueron una oportunidad para conocer a personas de ideas afines, encontrar una compañera de viaje e incluso amigas. El Femveloclub no es una competición o una carrera en plan performance. Se trata de reunir a ciclistas de todos los niveles: desde profesionales hasta principiantes. Para algunas fueron sus primeros 20 kilómetros y, para otras, estaba lejos de ser sus primeros. ¡Lo importante es que todas hemos recorrido nuestras distancias juntas!
También hicimos una vez senderismo por la montaña con tiendas de campaña. Hoy en día, Ivanka no tiene suficientes recursos para animar el Femveloclub de forma permanente, ya que la coordinación de un proyecto de este tipo requiere mucha dedicación y una preparación minuciosa, pero de vez en cuando, en un formato espontáneo, sigue habiendo un deseo de rodar juntas.
Seis millones de ucranianas y ucranianos han tenido que abandonar Ucrania, seis millones son personas desplazadas en el interior del país. Muchos miembros de Bilkis pertenecen a esta segunda categoría. Después de dos años de guerra a gran escala, ¿creéis que volveréis a casa un día? ¿Cómo lo vivís?
Ivanka: Soy del Donbás, de un pequeño pueblo llamado Rubizhne, en la región de Luhansk. Llevo dos años viviendo aquí y, para ser honesta, todavía me estoy adaptando: a un nuevo entorno, a una nueva rutina, a una nueva vida, a la búsqueda constante de nuevos vínculos y nuevos lugares favoritos. La mudanza y la adaptación se han impuesto en mi vida debido al ataque ruso, y no puedo considerar esto como una aventura o un viaje. No sé si volveré a Rubizhne o me quedaré en Lviv. La guerra total en mi país dura ya dos años, así que ¿cómo puedo tener sueños en esta situación? Por supuesto, tengo un sueño: la victoria y el regreso a casa. Mi región está ahora ocupada y he visto fotos de mi apartamento destruido. Estoy pensando la posibilidad de quedarme en Lviv durante mucho tiempo, así que seguiré creciendo aquí. Dondequiera que la vida me arroje, solo quiero tener la fuerza para hacer lo que quiero, vivir y ayudar a nuestro ejército. Hoy estoy increíblemente feliz de tener la oportunidad de estar en mi propio territorio. Sí, no estoy en casa, pero estoy en Ucrania. Eso me da mucha fuerza, aunque todavía estoy deprimida y vivo el trauma de la pérdida de mi casa, pero construyo pilares interiores sólidos que me apoyan en estos tiempos de depredación.
Habéis abierto el Espacio de las cosas en agosto de 2022 un lugar en el que puedes donar cosas (ropa, libros, etc.) y tomarlas según tus necesidades. Todo es gratis. Con el éxito del Espacio de las cosas, abrís un día para depositar objetos y un día para cogerlos. ¿Podéis decirnos quién dona y quién coge? ¿Qué dice la gente del Espacio de las cosas?
Nuestro proyecto del Espacio de las cosas ha estado funcionando con éxito durante un año y medio. Resultó que muchas personas pueden y quieren donar sus objetos a otras. Sin embargo, no podemos manejar la cantidad de cosas que la gente nos da (o quiere darnos). Por eso hemos establecido un calendario de aceptación de objetos. Por lo general, recibimos objetos cada dos semanas, pero a veces con menos frecuencia. En abril no tomaremos más objetos, pero los daremos, porque ahora tenemos muchos.
Más del 90% de las personas que nos visitan son mujeres. También hay hombres, pero mucho menos a menudo. Aunque destinábamos este lugar exclusivamente a las mujeres, damos la bienvenida a todo el mundo. Creemos que es porque, en primer lugar, nuestro público objetivo como organización feminista está formado por mujeres. En segundo lugar, las mujeres se dedican más al trabajo reproductivo y, por lo tanto, buscan aquí cosas para sus hijos, además, como limpian sus hogares aquí encuentran cosas útiles.
Como podemos estimar, el núcleo principal de nuestros visitantes son chicas y mujeres que a menudo toman y traen objetos, así como mujeres mayores que forman parte de grupos vulnerables (personas desplazadas, personas de bajos ingresos, personas sin hogar).
Hasta ahora, sólo hemos recibido comentarios positivos sobre nuestra ubicación, ya que tratamos de ofrecer un servicio de calidad y mantener un entorno agradable. La gente dice que este proyecto es útil, que les ayuda. Además, a menudo nos piden que abramos otros lugares en Lviv y en otras ciudades de Ucrania. Pero solo podemos conformarnos con un centro. También hay comentarios de que la gente utiliza nuestros servicios de forma deshonesta: para luego revender cosas, nosotras mismas hemos tenido tales sospechas en varias ocasiones sobre personas específicas. Sin embargo, no podemos evitar que estas personas se comporten de forma inapropiada. Y a pesar de estos casos muy raros, la mayoría de la gente entiende el significado y las reglas de nuestro espacio y las respeta (es decir, utilizan las cosas sin fines comerciales).
¿Podéis hablarnos de la pobreza en Lviv?
La pobreza ya ha sido un problema agudo en Ucrania en el pasado. Sin embargo, debido a la guerra y al deterioro de la situación económica en el país, el problema de la pobreza se ha vuelto aún más agudo en Lviv, así como en otras ciudades. La pobreza después de acontecimientos como la guerra aumenta debido a diversos factores como la destrucción de infraestructuras, la pérdida de puestos de trabajo, la reducción de la actividad económica y otros. La gente pierde sus hogares, sus medios de subsistencia y el acceso a los servicios básicos, lo que exacerba el problema de la pobreza en todo el país. Además, desde 2022, la población de Lviv ha aumentado porque la gente huye hacia el oeste, lejos del horror de la guerra. Nuestra iniciativa ayuda regularmente a las personas en situaciones difíciles dándoles comida. Esta es solo una forma entre otras de combatir la pobreza en nuestra ciudad, pero es una forma importante, ya que la comida es una necesidad fundamental para todo el mundo.
¿Podríais decirnos también quién viene a estas distribuciones de alimentos?
Diferentes personas se dirigen a nosotras para la distribución de alimentos. Por supuesto, siempre se trata de personas que están por debajo del umbral de la pobreza, pero su apariencia es muy diferente. Algunas personas parecen ser personas sin hogar, otras están vestidas “correctamente” y nunca habríamos pensado que tuvieran un problema con el acceso a la comida si las hubiéramos visto en un parque o en un autobús. A menudo hablamos con las personas que vienen a nosotras, y sus historias no dejan ninguna duda sobre su honestidad. Siempre nos hace pensar que la pobreza es un problema mucho más importante de lo que parece a primera vista. Alimentamos a todas, sin distinción de edad, sexo, género, etc., pero nuestras beneficiarias suelen ser personas de entre 28 y 30 años, de todo el país. Las mujeres y los hombres vienen a la distribución en proporciones aproximadamente iguales.
¿Cómo reacciona la gente ante esta iniciativa?
Si preguntas a las personas que vienen a los repartos, están abrumadas de gratitud. A veces parece que nuestras distribuciones de alimentos son una especie de mini-vacaciones en la vida de las personas necesitadas con las que nos vemos cada domingo. Nos gusta recibir sus comentarios y a menudo escuchamos un “gracias” de cada persona que viene a buscar comida, pero la mayoría de las veces recibimos mucho más reconocimiento y bendiciones. A menudo, las personas necesitadas se sorprenden al descubrir que no se trata solo de comida, sino de una comida deliciosa sin productos de origen animal. La mayoría de las personas que acuden a las distribuciones experimentan una vida y una situación difíciles. Ya conocemos un poco mejor a algunas de ellas, e incluso nos hemos hecho amigas de algunas de ellas. No queremos ser técnicas en nuestro enfoque de la distribución de alimentos, seguimos comunicándonos con ellas, nuestras comidas son solo un instrumento de atención, apoyo y solidaridad. Este es un enfoque muy importante para crear un proyecto social.
En cuanto a la cuestión de las personas que nos ven desde fuera cuando distribuimos comida, para ser honesta, ni siquiera les prestamos atención porque estamos ocupadas con las tareas. Cuando entregamos comida en taxi, los conductores a veces nos preguntan qué transportamos en contenedores tan grandes, y cuando lo descubren, nos felicitan. En general, toda la gente que conoce nuestro “comedor”, nos hacen comentarios positivos. Es agradable de escuchar y nos anima a continuar.
¿Qué dificultades habéis encontrado?
Hoy en día, prácticamente no tenemos más dificultades. Esta es una pequeña iniciativa en la que todas las participantes son intercambiables y si alguien enferma o se va de la ciudad, no es el fin del mundo. Hace un año, cuando empezamos, el proceso de cocción era nuevo y poco controlado. Nos equivocábamos al calcular la cantidad a cocinar. No sabíamos cómo llevar la comida caliente y distribuirla para que todo el mundo tuviera suficiente. Nos tomó mucho tiempo y esfuerzo entender cómo cocinar varias docenas de porciones a la vez. Con la experiencia, hemos mejorado todos los procesos y hemos elaborado un menú. Hoy en día, se trata simplemente de un cierto “algoritmo”.
El verano pasado tuvimos dificultades con el público. El antiguo lugar de distribución estaba en una zona residencial, donde habíamos traído una mesa plegable. Después de comer, la gente iba al baño entre los arbustos, hacía cola temprano y hacía ruido debajo de las ventanas. Esto molestó a las y los habitantes del edificio, y escuchamos constantemente quejas y amenazas. Ahora estamos haciendo la distribución al lado de la iglesia, donde hay acceso a los baños, y la gente se comporta un poco más educadamente junto a un edificio religioso. Aunque no tenemos nada que ver con la iglesia. Simplemente estamos ubicados cerca. La única dificultad ahora es encontrar financiación para este proyecto.
Página Facebook de Bilkis
Traducido por Faustino Eguberri
Publicado orginalmente el 29 de marzo de 2024